El POT es la oportunidad para definir la hoja de ruta del desarrollo de Bogotá del 2022 al 2035. De esta manera, acordaremos entre todos y todas para dónde va nuestro territorio, cómo se debe transformar y cuáles son los proyectos estructurales para lograrlo. Es así como se mejorará la calidad de vida de las personas a través del uso racional del suelo. Para ello es indispensable acordar la mejor forma de localizar las viviendas, las actividades productivas, los lugares de patrimonio, culturales y de esparcimiento, y los perímetros de las zonas protegidas.
El POT orienta y prioriza las decisiones e intervenciones generales que debe hacer la Administración Distrital, que permiten el desarrollo y mejoramiento de los parques, andenes, ciclorrutas, los centros de atención a la población, las vías, los servicios públicos y los equipamientos. Es por eso que es importante conocerlo, para que en los Planes de Desarrollo de cada una de las administraciones que lleguen, se le dé continuidad a los proyectos estratégicos. Es importante mencionar que el POT también prevé las posibilidades de desarrollo de programas conjuntos entre el sector público y privado.
El objetivo principal del POT se centra en mejorar la calidad de vida de los habitantes; esto, mediante acceso a las oportunidades y beneficios que ofrece el desarrollo de la ciudad, así como también el desarrollo de equipamientos para los servicios sociales, utilización racional del suelo, sostenibilidad ambiental, seguridad de la población ante riesgos naturales y la preservación del patrimonio.
El POT es el orientador de las decisiones que toman los alcaldes. La planificación del territorio sirve como soporte para gestionar los recursos adicionales de financiación ante las entidades del Estado, que permiten la ejecución de proyectos e infraestructuras.
Permite un uso racional del suelo, así mismo las condiciones para el reparto equitativo de cargas y beneficios, relación equilibrada con el medio ambiente, preservación del patrimonio cultural, fortalecimiento de los agentes que influyen en el mejoramiento de la calidad de vida y la generación de recursos propios.
A 2035, Bogotá se consolidará como una ciudad recuperada, reactivada y reverdecida, gracias a la implementación del modelo de ocupación del territorio definido en El POT ´El Reverdecer de Bogotá 2022 - 2035’.
Durante año y medio hemos resistido, pero también hemos sufrido como ciudad. La pandemia arrasó con muchos de los logros que habíamos alcanzado como ciudad, pero también nos abrió retos y oportunidades que debimos tomar.
La necesidad ahora es volver a recuperar la ciudad para la productividad, los encuentros, la salud, la calidad de vida, la vida. Recuperar la ciudad es recuperar su salud, recuperar la economía, recuperar el ambiente, para volver a salir a la calle, en donde está la vida.
Con este POT buscamos consolidar y dar la norma que se necesita para el renacer, la recuperación, la reactivación y el reverdecimiento de Bogotá en 10 sentidos.
• La ciudad de la productividad después del incremento del desempleo.
• La ciudad de la inclusión socioeconómica después del aumento de la pobreza.
• La ciudad del espacio público y el aire libre después del aislamiento.
• La ciudad del reverdecimiento después del endurecimiento.
• La ciudad de la descarbonización después del diésel y la contaminación.
• La ciudad de la red metro y multimodal después de la dependencia del bus.
• La ciudad del peatón y la bicicleta después del reinado del automotor.
• La ciudad de la mujer y el cuidado después del maltrato y la indiferencia.
• La ciudad ecourbana e integrada después de la ciudad insostenible y segregada.
• La ciudad que se aproxima, se integra y por fin, se hace Región.
Este POT consagra la Estructura Ecológica Principal como el ordenamiento preponderante, de mayor y superior jerarquía en este POT, que prioriza el territorio alrededor del agua.
A la concertación ambiental con la CAR, con la Secretaría Distrital de Ambiente y con la sociedad, le proponemos:
• Una ciudad que reconoce y protege la estructura ecológica principal.
• Una ciudad que protege integralmente la Reserva Thomas Van Der Hammen.
• Una ciudad que crea áreas protegidas ambientales de la media luna del sur.
• Una ciudad que no urbaniza las áreas rurales de borde como la UPR norte.
• Una ciudad que delimita y protege integralmente al río Bogotá.
• Una ciudad que se planea para respirar un mejor aire.
• Una ciudad que declara sus humedales como reservas ecológicas y los amplía +20%.
• Una ciudad que protege los cerros orientales y los ecosistemas de montaña.
• Una ciudad que crea y siembra bosques urbanos para mitigar el cambio climático.
• Una ciudad que crea una red de conectores ecosistémicos para su biodiversidad.